¿Y si mañana renunciara a todo aquello que equilibre la balanza?

23 nov 2009

A una madre que se va.

Se va, quien más me ha querido se va.
Nadie me explica por qué,
a nadie le importa lo que yo sienta.
Se va, que alguien diga que no, que mienta...

Me quise agarrar al fino hilo de escarcha,
que el de blanco me dejo, mas resbalé
Me caí, pero no repose en tus rodillas,
ahora sé que no volvería a hacerlo...

¿Quién me quiso más que tú?
Que se jugó la vida en el empeño de mi nacer.
¿Quién me querrá más que tú?
Sé que desde el cielo me protegerá...

No aguanto más, una lágrima se derramó por mi mejilla,
recordé mi infancia, cogiendo a aquel doctor por la pechera.
Explíqueme qué pasa, doctor, no entiendo nada...
Pequeño, tu madre se marcha...

No fue más que la llamada de Dios, que irá con él de su mano hasta el cielo.
Pero por qué ahora, por qué mi madre,
qué hizo ella, santa y luchadora, para merecer esto,
que nunca te negó plegaria, que nunca dudó de tu presencia, Dios, por qué te marchas con su esencia...

1 comentario:

  1. Es preciosa, los designios de dios...quien osaria debatirse contra el viejo barbudo, dicho el, invicto siempre queda ¬¬

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