¿Y si mañana renunciara a todo aquello que equilibre la balanza?

30 abr 2011

Todo lo que tengo.

Noche, día y confusión.
El descontrol de un sentimiento eterno.
Que naufragó por el constante tiempo,
y vivió locuras, dolores y desconciertos.

Viste de llanto al alma,
y al alba, te viste de ilusión con calma.
De noche en tu cama con pasión te destapa.
De día, en recuerdo se convierte si no está en tu vida.

Él lo es todo, él no es nada.
Hace sombra a cualquier mañana.
Es despertar, es no dormir, es soñar con tenerlo,
o perecer sin poseerlo, querer que nunca más se escape.

Shakespeare le llamó Julieta,
la muerte llamó a Romeo.
Todo en color lo veo si le poseo,
y si le pierdo, diluvia la pena sobre mi espalda.

Miles de lágrimas corren por sus venas,
alegría y dolor, acompasado por el mismo compás.
De ilusión, pasión, emoción, poca realidad.
Sinceridad dada al que extrañas, la esperanza tu esperanza.

Es poesía cuando corre y fluye lento el sentimiento.
Es rap, muestra pasión, es carisma y desamor rabioso.
Fue Neruda, fue Lorca, vivo quien te toca, muerto el que te pierde.
Fue música, fue canción, y en la voz de da Vita se convierte.

Fue composiciones de Sanz o de Ferro,
te trata como un perro si te equivocas al quererlo.
Es danza, es un ideal, es narrativa.
Es lo que el Viento se llevó, es el Crepúsculo en el día.

Es un amanecer bello, un atardecer distante.
Es la fiesta eterna, es la que dura un instante.
Nadie puede controlarte, eres libre como un escultor,
que en sus manos reencarna a Eris y Afrodita,
como muestra de su aprecio hacia tu locura infinita.

Hay quien te teme, hay quien te añora,
eres un gran sentimiento si vives en prosa.
Eres un desierto en medio de este oasis,
provocas guerras si eres fuerte, salvas naciones si te tienen.

Y si te aguardan mucho tiempo te vuelves dolor,
eres inspiración para el poeta, eres voz al cantautor.
Eres sueños para el niño, eres la musa al pintor.
Eres todo lo que tengo, eres tú, eres amor.

28 abr 2011

Tres amores, una esperanza.

Hoy por hoy, tengo tres amores.
A dos las quiero con locura, el otro me causa dolores.
A una la llamaré poesía, y su melancolía
me destroza, parezco poca cosa a su lado,
y atado de pies y manos caigos,
por una incertidumbre que me está matando.

Al otro con más ritmo hoy le llamaremos música.
Que aparece y me destroza como hicieron aquellas guerras púnicas,
con una realidad marginal al lado de mi incomptencia,
y la imprudencia se convierte en ciencia cuando está delante tu presencia.

Busqué ayuda con el tercero.
Le dobo todo lo que soy, me debe un golpe certero,
que me arrastre hasta el infierno donde me quemó,
ahogó, lloré y ahí estabas tú para salvarme.

Poesía apareció para romper con mis esquemas,
tu llama más no quema, pues tu frío la congela,
quedo en la eterna espera, de saber si fue factible,
y de manera incomprensible, música se hizo invisible.

Y la duda me mató, ¿dónde estaís? ¿quien soy yo?
Busco ahora a las musas que me quitó el colocón,
mi empaco de borracho, sintiéndome un gusano,
que necesitó de tu mano, para volver a ser humano.

Hoy el miedo a recaer me estremece, la felicidad perece,
hoy el tiempo corre, y mi nombre aún más crece.
Mi hizo un hombre, eso le debo, dejé el boli por su miedo,
y al compás del tiempo vuelvo, no me siento desacompasado,
y si soy pesado, espero serlo lo suficiente para caer a tu lado.

Te quiero; telegrama.

Hola. ¿Qué tal estás pequeña?
Como puedes observar, todo lo que nos oyó gritar se ha roto.
No queda absolutamente nada de nuestro paraíso calcinado.
Sé que hace tiempo, demasiado tiempo quizás,
por eso te saludo extraño, me preocupa como estás.
En ti no paré de pensar, sé que te fuiste, y no volviste.
Sé que hoy la decepción te viste, pero pequeña, sin ti no aguanto los embistes.
Te echo de menos, y menos cosas quiero echarte encima,
pero permite que te escriba como ya lo hice en su día.
Permite que vuelva a tu vía, que este andén parado nunca más quede.

Hola, perdí la poesía desde la última carta.
Esperé una respuesta, que por lo visto tarda.
Quiero leerte desde hace tiempo, pero al parecer de nada sirven mis intentos.
Quizás cambiaste de casa, pero mira que me extraña,
si en ella hoy guardas una a una las batallas.
La metralla que ese cuarto me escondía, y descubría una vida
en el sofá, de melodía un televisor está, y con la manta bajo el brazo,
guardo aquel papel mojado, en que escribiste;
"Te quiero", sin haberlo pensado.

Creo que no me respondes a mis cartas, porque echas de menos
mi falta, y ahora todas las farsas a un lado quedan.
Te echo de menos, y no se como expresarlo, pero tanta sin razón,
a este corazón lo está matando.
Nunca entendí tus celos, si siempre dije te quiero.
Hasta fui capaz de darte un beso, sin saber lo que era eso.
Renegué los versos y sufrí los golpes, en los huesos que hoy me claman: torpe.
Sabes que nunca fui de esos, que les gusta ser un preso,
de tristeza siempre obesos, si les haces sentirse presos.
Pero por tu mirada anclada en mis gesto y en mi labia,
dimos al traste con todo, de lo cual no queda nada.
Es la última carta que te mando, será lo último que escribo con un beso para ti sellado, y firmado en letras rojas; "Te quiero siempre a mi lado"

25 abr 2011

Ending whit this December.

I asked you to stay, just a few minutes more.
I just wanted to be with you, but, the facts
of someone that weren't me, toke you out of my road.

Let me lose my mind in Tubber, I don't wanna continued fighting.
I'm just tired about this game, where you always have the ace,
and where I lose the control, I died between a lot of queens,
so diferent to you, never special them, never clever me.

Come back, just have a chat. I wanna talk with you,
hearing your voice once I sure I could take off from pain.
Cool, you talk to me one more time, but me mind go blind.
No words I found for you, there ain't more feelings to show you.

You must be shouting, 'cause I can't hear my heart.
I think he's saying something about love you,
that being without you is killing him.
This emotional rollercoaster it's leading me to madness...

This is the end of gloom, it's time to end whit this December
that in the past seemed to be for ever, but it's finishing slowly.
Of course I remember that love it's a mathematical error,
but sorry, I wanna think that the error tonight it's just gonna be relative.

24 abr 2011

Males modernos.

No soy feliz aunque me ría.
Prometí seguir riendo, pero ya no tengo ganas.
Me las debió robar el tiempo o el dolor...

Me siento, se que existo, pero no logro entenderlo.
Sé que de todo lo que soy, sólo la peor cara se conoce,
o se quiere conocer. Asusta la idea de que alguien como yo
corra libremente por aquí, debe ser eso, una vez más; ignorancia.

Me siento así; levitando sobre la nube de polvo que ha levantado mi pasado.
Las ostias recibidas duelen, y las que intento dar me machacan,
me acribillan a balazos cargados de odio.
Y no sé esquivarlos, no se odiar, aunque duela...

Mi equilibrio debió nacer torcido, no me contonéo por el exceso de peso
en un corazón de avispa.
La gente se pregunta que sucede, y la sonrisa es mi respuesta.
Quien me entiende o quiere entenderme, dejó de creerse ya mi cara,
dejó de tener sentido mi gesto.

Todos se preguntan que sucede, pero nadie se pregunta por lo que no sucede.
Por lo que falta, por lo que no está, por lo que me sobra...

Mi familia no me entiende, y tienen miedo de perderme.
Mis amigos no saben entenderme, y ven como lentamente mi razón se duerme.
Mis enemigos no quieren entenderme, y disfrutan viendo como mi corazón se muere.
Y quien me quiere siente impotencia, no encuentran el remedio,
y yo tampoco se explicarles qué me pasa.

Mis males modernos...
Sólo exigí a este mundo poder entenderme a mi mismo,
y a cambio me hizo entender al resto.
Pedí a alguien que me quisiera como soy, y me hizo amar la humanidad con sus defectos.
Rogué un lugar para mí, he hizo de este mundo mi jaula.

Quizás ese fue mi error, fui demasiado egoísta, y la gente se empeña en que lo sea más...
En un mundo de locos, el más cuerdo suele ser tratado como un loco,
y al más loco le tratan de usted...
Mis males modernos serán los culpables una noche más,
pero pensar que te he perdido por causas agenas... me destroza.

23 abr 2011

Perderte.

Como amantes celosas vuelven aquellas palabras que te dije.
Envuelven, como ayer lo hizo el alcohol, mi cabeza.
Ideas de tragedias apuñalan mi entereza,
y con prudencia ando lento, para no volver a caer.

Hoy será un buen día para que crezca mi melancolía,
te echo de menos, y sin embargo, no te dejas ver.
Esas palabras fueron balas, al compás de una melodía,
que compuso el horizonte; inalcanzable, y penetrante.

Distante la luz, como luciérnagas venía cuando más la quería.
Me proponía correr, escaparme de este mundo, llegar algún lugar
en el que volver a nacer, y esperé hasta entonces,
huyendo de mis miedos cada vez que ellos venían pero...

Me cogieron, me engañaron. Prometieron sueños que no han cumplido.
Fui novato, y me terminaron robando lo que más ansié.
Lo que me dio luz y cobijo, cuando apenas siendo crío
comprendí que este mundo no era igual sin ti.

Poesía, vida mía, cada día yo te imploro, adoro, rezo,
te admiro y me confirmo como tu seguidor, tu hijo.
Poesía, por ti todo valía, me dabas la alegría
cuanto más te escribía, más me sonreía aquella vida que narraba como mía.

Pero un día te fuiste, no volviste desde entonces.
Cambié tu presencia por amor, y así me fue...
Quizás fue por que amor no supo comportarse,
o quizás por que el ansía de no encontrarte fue mi perdición desde aquel instante...

20 abr 2011

Lógica estrófica.

Cambié la estética moral, por la lógica estrófica.
Suprimí enseres de dolor parturienteos,
intenté borrar por un momento la tristeza,
y en vez de vacío, una voz llenó mi mente.

Fue una voz sensual, y retocada simplemente
con un leve suspiro, en susurro, para que sólo yo pueda oírlo.
Me explicó la diferencia entre el querer llegar a ser,
y el tener que ser de manera destinada.

Me contó que había nudos imposibles,
retos fascinantes entre los que se encontraban rayos de esperanza.
Me narró relatos a cerca de la estancia de la pena en su alma,
de como lo supercicial un día lideró,
y ahora quedaba renegado.

Tantas cosas me contó su voz...

No acostumbro a hablar de amor, si bien es cierto, siempre lo hago.
Soy metáfora en mi mismo de sentimientos sin control,
personificación del todo, para terminar siendo nada.

¿Quién es ella? ¿Quién eres tú?
¿Acaso yo pregunto eso?
¿Quién soy yo? ¿Qué? ¿por què?
¿Hasta dónde? ¿Dónde acaba?

Inspira ondo, tranquila, tranquilo yo...
Hay barreras infranqueables, destinos preparados a conciencia,
y basándose en alguna ciencia; negamos la existencia del amor.

Quizás no supuieron buscarle, quizás no dejaron encontrarse.
Quizás... sólo el tiempo tendrá la respuesta.

19 abr 2011

Historia sinclusión.

Pierdo la esperanza.
Las arenas del tiempo me delatan
como pasajero del tren de añoranza,
que hoy aborda su última parada.

No termino de comprender mi pasado,
retales de recuerdos que en ocasiones afronta mi presente.
Sin embargo, me embarco en la aventura de un futuro
en el que el presente sea distinto a este pasado.

¿Cuanto tiempo pasó desde entonces?
Dos, tres... ¿cuantos años han echo falta?
Inmerso en un mundo entrecortado por el aliento de una muerte inesperada,
la pena daba paso a una alegría que efímera será, pero seguro necesaria.

Un mísero apoyo para este Atlas acongojado
por la inmensidad de su trabajo;
sujetar el mundo actual, comprender el pasado, y planificar un futuro.
Inestable quizás, pero éste es el plan a seguir...

Mariposas de colores revoloteaban esta alcoba,
sombría, apagada por un sol que nunca vino de frente,
hasta ese instante... y el mundo recibió de nuevo su color.

Quién fue Princesa en Celestina se convirtió.
Sancho cambió Castilla por lo páramos del Ebro,
y como su afluente eterno, condujo a la cordura
a un Don Quijote disfrazado de Don Juan.

Quizás mañana sea un nuevo día, yo sonría y el tiempo pare.
Desgane a la tristeza, y termine con la misma historia de siempre.
A cualquier cosa se acaba aferrando la ilusión antes que caerse,
al parecer, incluso a esta historia dolorosa sinclusión aparente...

16 abr 2011

Soledad.

Vi aquella imagen reflejada en su espalda.
Nítida, tan nítida como sólo una fotografía podía serlo,
la cruda realidad impregnada en una imagen,
desafiante, nítida, cruel.

Para odiarte tanto, antes tuve que amarte demasiado.
Esta mente pordiosera me confunde cada noche,
piensa en volver a verte, y cuando tú vuelves se esconde.

¿Dónde empieza?, ¿dónde acaba? Este sentimiento tan mío como la nada,
que recuerda que te vas, te alejas, ahora te marchas.
Mi corazón quiere gritar, pero no existen las palabras.
Vuelve, marcha, corre, te amo y te odio, te necesito.

Necesito saber que cuando yo me caiga; bien reirás, bien me ayudarás.
Pero no puedo pensar en tu pasivadad ante mi realidad,
eso me mata, me ametralla, y tanto odio me consume.

Sin embargo, hay noches que tan cerca te veo como te extraño,
me hace daño pensarte, echarte de menos y repudiarte,
al mismo tiempo en el que mi lógica aplastante,
se unde en el fango de quién no sabe expresarse.

Poesía, dame una razón de ser.
Dejó de ser mi Guiomar para ser mi Lucifer.
Por qué la odio tanto, si es mi musa, es mi grandeza.
Es todo lo que tengo, pero pienso en no tenerla.

¿Podré seguir así? El tiempo hoy dirá,
pero querer acabar con ella, es mi enfermedad.
Hoy es mi condena, pero sin ella no se andar.
Amor y odio, hacia una misma necesidad; soledad.

11 abr 2011

Sol de primavera.

Este cristal permite ver el sol.
Alumbra el vagón del tren con su luz.
Derrite el mal...

Un solo de guitarra rompe mi ensueño,
a lo lejos, pájaros chirrían el compás del tiempo.
Si no queda tiempo para vivir,
quizás compramos demasiado poco.

Mi sombra enpapelaba la pared continua,
demostrandome así el sol, que poseo dos caras;
la que muestro cuando me miras,
y la que muestro cuando te marchas.

Un olor a muerte me conquista,
golpea con furia mis sentidos.
Mi niño por fin a muerto...
la luz ha prevalecido.

Este cristal permite verte de frente,
alumbra mi alma con su solo pestañeo.
Mi corazón, más cálido, revive su deshielo.
Tu luz a mis ojos, libertad al preso...
infinita mas inviable, cerca mas imposible,
esperanza y deseo, y en un pestañeo.

Claudica la sombra que apuñalaba mi pecho,
me guía el tenue susurro del viento que azota el monorraíl,
mis vías serán tus pasos, y mi destino estará junto a tí;
sol de primavera!

10 abr 2011

Al alba...

Hoy es una tarde de melancolía.
De esas en las que devorarías el reloj
para que todo se parase y pudieras reorganizar tu vida.
En las que cambiarías cada segundo que pasas en tu cuarto,
por una micra de segundo con ella.
Tardes en las que no poder cambiar tu pasado para mejorar el presente,
te hace morir dentro de ese cuadrilátero que te enfrenta
otro día más a la soledad.
Que nada cambie después de esa noche es imposible.
Que nada vuelva a ser igual es... improbable.
Era impensable que otros labios fueran los suyos,
que los besos cambiasen de dirección, o
que el viento arrugara mis mejillas.
Era imprevisible el rumbo de su pelo negro,
bailando al compás de aquel rojizo sol de primavera.
Y al alba, comprendí cuanto la quería, y al alba, al alba...

La melodía quiso teñirse en agria esta tarde
en la que no te tengo.
Y por igual, miles de tristes poeta náufragos de su destino,
intentarán explicar hoy tu caminar.
Nunca fui un buen narrador de historias,
siempre preferí vivirlas a contarlas desde fuera,
pero la nuestra... me resulta imposible callar.
En esta tarde de melancolía se está muriendo otro pedazo de mi alma.
Mataría a esa nube que me cubre si pudiera.
Contaminaría el cielo con retales de tu pelo,
y entre tus dedos posaría mi calma.
Y al alba, comprendí que mi alma residía entre tus brazos, y al alba, al alba...

Viento, corre.
No escuches este llanto, no escuches a este poeta.
Estoy consumido por un tiempo que no es el mío,
pues este reloj no marca su corazón.
Estoy marchito por la falta de su saliva.
Estoy quemado por el fuego que desprende quererla sin tenerla.
Hoy, escuché su voz al despertar,
volviendo a morir en esta cama que me está convirtiendo en esclavo.
Agua, llora.
Mereces llorar si así lo quieres,
no corre el agua si no hay desnivel,
y siendo emocional en este caso, agua; corre.
Pues la echo de menos, sus manos no están aquí para guiarme,
su voz y su aroma ya no me tranquilizan, y su ausencia me aniquila.
Me extermina, me destruye, me corrompe, me destroza, me humilla,
me mata, me hiere, me quema, me duele, y su recuerdo...
Y al alba, quité los elementos que estorbaban hasta ti, y al alba, al alba...

Una tarde melancólica dio paso a una noche sin fronteras.
Mi mente voló fugaz por cualquier rincón alejado de tu ser.
Mis dedos martillearon aquel teclado,
trasportando sentimiento al triste papel.
La echo de menos Luna.
Duda, la quiero a mi lado.
Fue mi almena, mi alabanza ante Dios,
fue mi ilusión y mi esperanza.
Dime que no marchó por siempre,
dime que volverá su recuerdo.
Amor mío, ¿dónde quedas?
Tengo mucho que decirte, y no veo tus piernas.
No puedo seguir tus pisadas, pues no veo a donde llevan.
Y mientras tanto sigo esperando a que quieras llegar al alba...

Si te dijera amor mío, que temo a la madrugada.
Presiento que tras la noche, vendrá la noche más larga.
Quiero que vuelvas, amor mío... al alba, al alba...

5 abr 2011

Ansia de poesía.

Borré cada palabra que sobraba,
opuse dolor y amor dispuesto a cambiar el mundo.
Rumbo de aquel que clama que no quedará mañana,
que no duerma en mi cama o que acaba con mis ganas.

Postré la realidad ante mi alma, ser humano me perdió.
No queda rabia en mi palabra, sólo ansia de victoria,
de saber que estando en gloria, estaré contigo amor.

Y no reniego de quien soy, hoy no culpo al destino.
No me siento asesino de los versos fugitivos,
que de mi garganta escapan, y se avalanchan,
ante el ventanal de pana que hoy afiló mis garras.

Si me agarras yo te abrazo, villano, te robo un beso.
Muerdo el peso de este polvo, que hasta ayer cubrió mi cuerpo.
Beso el suelo con las manos, para darme más impulso,
y poder decirle al mundo que del arte no reniego.

Que vuelvo moribundo, sí,
pero regreso, para cambiar un mundo que no es feliz sin serlo.

Tengo ansia de picardías, de miradas indiscretas.
Tengo ansia de silencios que dejen puertas abiertas.
Tengo ansia de poesía, de noches en vela.
Y sin ansia muero y digo, tengo ansia de tenerla… poesía.

3 abr 2011

Musas del Sistema.

El suave llanto del cielo diluvia en mi ventana.
El alma; apagada o en silencio.
No concibo este universo sin retales de las ganas,
de salir corriendo de este funesto cuarto en llamas.

No siento prisión ni agobio, no siento dolor alguno.
No siento vacío en mi pecho, no siento puñaladas,
quizás no siento que no siento.
Pero es cierto que siento la desgana rutinaria del lamento.

Mi habitación se cansa de esperar al ciervo herido, cada noche,
después de hablar contigo muere el alba,
madrugadas de deshielo que olvidan que te conozco,
y un amigo me cuenta, que ni él sirve tampoco.

¿Dónde está lo que conozco del corazón de este perro?
Que ladró a la Luna, por amor y por despecho.
¿Quién es el desecho que hoy ocupa mi alma?
Qué hizo con mi vida, que hizo con mis ganas.

Quise salir corriendo de este cuarto moribundo,
que me encierra, y le suplico que me deje ir en paz,
la misma que me arrebató al encontrarme,
y ofrecerme un pacto, que por dentro me arde,

y me quema la deshonra de las musas del sistema,
que por rutina hoy son mi condena,
y cada gota nueva que perece contra el suelo,
no son más que gotas, que murieron sin consuelo.

¿Dónde está el error de sentir amor?
¿Acaso aquel que nunca quiso vive mejor?
¿Dónde está la ilusión de enamorarse,
el miedo a equivocarse, y la pena de marcharse?

¿Por qué todo se complica a quien dicen ser mesías?
Nadie me dio a elegir condición alguna.
Si superación es mi motivo, si mi alma son tus besos,
hoy no tengo alma, por que sin tener tus besos muero.

Posdata: Pido perdón por la calidad de las últimas obras, a mi personalmente no terminan de gustarme, espero que poesía vuelva pronto por aquí.